Testimonios
Sophia es una paciente con quemadura grave atendida en COANIQUEM. Sufrió sus quemaduras el año 2005, cuando tenía 2 años 3 meses. Hoy ya tiene 18 años. La atendí junto a mi equipo en el Félix Bulnes en su etapa aguda y luego en COANIQUEM para su rehabilitación.
Su mamá nos entrega su testimonio:
“Cuando mi hija Sophia se quemó, fuimos derivados al servicio de urgencia del Hospital Félix Bulnes, donde la doctora Espinosa formaba parte del equipo médico de quemados del hospital.
Al principio fue difícil escuchar la información que la doctora entregaba en relación con las quemaduras de Sophi y me puse un poco a la defensiva.
Al salir del hospital y comenzar la atención en COANIQUEM, fue la doctora Espinosa quien siguió con el tratamiento de Sophia, y fue ahí cuando pude entender y comencé a encontrar respuestas a la forma en que me hablaba, ya que hasta ese momento mi hija era el caso más grave que habían atendido.
En un principio, en el hospital un equipo súper comprometido con mi hija, siempre atento a las necesidades de ella, la atendieron sin importar días y dejando en ocasiones hechos importantes en sus vidas personales.
Siempre la pusieron primero en sus actividades, como familia siempre nos mantuvieron informados y partícipes de su proceso de recuperación.
Gracias a Dios y sus cuidados y nuestra fe, Sophía salió del hospital, contra todo pronóstico, mucho antes de lo esperado. Estuvo 1 mes, cuando se pensaba que mínimo serían 3 meses.
Luego de ingresar a COANIQUEM, el equipo multidisciplinario que recibió a Sophia se comprometió y la atendió a ella y a nosotros como familia. Explicando cada proceso, cómo sería la recuperación y enseñándonos cómo y qué acciones realizar en casa. Hasta el día de hoy Sophia es atendida en este centro al cual le debemos mucho ya que no hay diferencias en la atención.
Para nosotros COANIQUEM ha sido parte de nuestra familia en este proceso y la doctora súper comprometida con Sophia hasta el día de hoy.
Doctora, muchas gracias por todo. Desde que llegamos a COANIQUEM y pude decirle lo que me había pasado cambie altiro mi opinión. Usted ha sido un gran apoyo para nosotros no tenemos con qué pagar el compromiso de usted para con mi Sophi, su corazón es grandotote ♥️♥️♥️♥️”
«Luciana es una niña alegre, muy despierta y llena de buena energía. Siempre recordaré el famoso día y el resto que nos tuvo en las cuerdas. Su quemadura ella la llama parche, porque es muy similar a eso. Felicitaciones y ojalá estas historias muestren el lado humano de ellos, los médicos. Y lo impactante que es una quemadura y cómo nos puede cambiar todo».
Conocí a Luciana cuando sufrió una quemadura al año y medio de edad, un momento muy delicado para ella y su familia.
La traté por una escarlatina secundaria a una quemadura, hoy tiene ocho años y es muy emocionante ver lo grande y linda que está.
Gracias a su familia por compartir su historia.